sábado, 16 de julio de 2011

Capitulo 2

Era Justin Bieber, ese chico al que millones de chicas adoraban. Me acerque más a él y me dijo con una voz muy tierna.
Justin: Hola, tú debes de ser la sobrina de Scooter ¿no?
Yo: Sí, soy yo – dije con voz de pocos amigos.
Justin: ¿Y te llamas?
Yo: Romi.
Justin: Ah, yo Justin, por cierto bonito nombre – dijo con voz dulce.
Yo: A vale – dije con una voz tipo no me importa.
Yo: Bueno tío me voy a por las maletas, ahora vengo – dije dándole un beso en la mejilla al irme.
Me fui a paso ligero, no quería estar cerca del niño ese.

Pensamiento de Romi:
Dios, acabo de conocer a uno de los chicos más famosos y más deseados del mundo y sabéis una cosa, no, no me cae nada bien.

Narra Justin:
Justin: Scooter, que simpática es tu sobrina ¿no? – dije con voz de sarcasmo.
Scooter: Sí, un encanto de chica – dijo riéndose – cuando la conozcas mejor seguro que os lleváis bien, pero te lo digo, no es una de tu club de fans – dijo descojonándose prácticamente.
Justin: Lo he notado, y me da que no le caigo bien – dije riéndome – aunque todo puede cambiar – dije sonriendo.

Narra Romi:
Mientras cogía mi maleta, me sonó la Blackberry, era él, mi chico, James.

Conversación telefónica:
James: Hola preciosa.
Yo: Hola amor.
James: ¿Donde estas?
Yo: En el aeropuerto, con mi tío y con uno de esos engreídos nuevos talentos, nada tan importante como tú.
James: ¿Sabes cuando vuelves?
Yo: Ni idea – en ese momento oí la voz de mi tío que me pidió que fuera – bueno mi tío me llama, luego te llamo. Adiós te quiero.
James: Yo más.
Cierre conversación telefónica.

(James era mi chico y era simplemente perfecto; sus ojos eran del color del mar y cada vez que me miraba a los ojos tenía la sensación de estar flotando en medio del océano; sus cabellos eran castaños y muy lisos y suaves… me encantaban las tardes de viento, en las que su pelo se movía suavemente. Sus labios eran carnosos y por qué no decirlo, tenían un sabor a fresa delicioso; su sonrisa era blanca y tenía unos dientes perfectos. Era corpulento porque iba al gimnasio y así en verano decía que quería estar a mi altura. Era el chico perfecto.)
Scooter: ¿Con quién hablabas Romi? – me preguntó fingiendo interés por mí.
Yo: Con James – dije aún con una sonrisa en la boca.
Scooter: ¿Ese es el chico que te trae loca? – dijo riéndose.
Yo: Jajaja ese mismo.
Cuando dije eso Justin me miro con una cara de tristeza, no sabía porque, pero tampoco me importaba, no me importaba él ni como se sintiera, a mí solo me importaba James.
Scooter: Vámonos ya que tenemos que coger un taxi.
Yo: Esta bien, pero estoy harta es siempre lo mismo, del avión al hotel y del hotel al avión, y yo nunca tengo tiempo de ver a James.
Scooter: Bueno Romi, no seas así, ahora puedes ver a Justin, que seguro que os lleváis muy bien.
Yo: Si vamos, igualito que James.
Justin: Ni que el James ese fuera tan bueno y yo tan malo niña- dijo con un tono enfadado.
Estaba a punto de contestarle cuando me interrumpió mi tío diciendo:
Scooter: Pues Romi si tú quieres, se puede venir algún día, ya que pasaremos bastante tiempo aquí.
Yo: ¿De verdad? Muchas gracias, por mi genial tío – dije sonriendo.
Y de pronto Justin dijo…

1 comentario: